¿Tiene la Enfermedad como causa la Falta de Amor? ¿Puede la falta de amor llevarnos a la enfermedad? Desde 1965, el Dr. René Spitz habló de las secuelas o enfermedades que afectan a los niños por la privación de afecto o cariño, demostrando la importancia y la legitimidad del amor en la salud de los niños y adultos. Y cuando se dice salud no separamos lo psicológico de lo físico, puesto que son lo mismo. En el organismo en general, existe una armonía y un equilibrio que se pierde cuando su interacción no es congruente: la violencia, la soledad no deseada, la indiferencia, el desamor, la ausencia de amigos y miles de cosas más afectan esa armonía; entonces los procesos que regulan la salud se alteran y somos más vulnerables a la enfermedad. La buena salud requiere: buena alimentación, ejercicio, descanso nocturno y toneladas de amor. Es probable que un déficit afectivo crónico pueda incidir en algunas enfermedades. El sufrimiento humano y la mayoría de enfermedades tienen su origen en la negación del amor. Vivimos época de carestía afectiva donde para muchos el abrazo, la gentileza, la confianza, el amor y el cariño se han vuelto especies en extinción. La falta de amor mina la salud incluso hasta la muerte. ¿Qué nos impide ser genuinamente afectuosos? Veámoslo. No se trata de ser positivo, ni espíritu nueva era, créame este asunto es mucho más serio de lo que parece.
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ES MUY INTERESANTE EL TEMA YA QUE SOMOS ARTIFICES DE LO QUE ESTAMOS HACIENDO EN LOS NIÑOS Y LO BUENO O MALO QUE HAGAMOS REPERCUTE EN ELLOS EN SU DESARROLLO
A mi modo de ver la deprivación crónica de afecto-amor puede ser un condicionante de la enfermedad en general. Hablar de causalidad es más complejo, por eso me parece más acertado hablar de condicionante. Se ha conjeturado en la psiconeurología que toda aferencia que entra al cerebro,entre ellas las palabras, los gestos y las caricias, provoca una respuesta o eferencia en el SNC, y esta respuesta puede afectar molecularmente la producción de neurotransmisores y otras sustancias reguladoras de la homoestasis en el ser humano.
Gracias por tu comentario Omar, muy bueno y aclarativo.